25 noviembre 2010

Pablo

Se ha abierto la caja de Pandora.
La pesadilla de Pablo es repetitiva y escalofriantemente real, como cuando tenía casi 6 años y entraron a su casa, en agosto del '77: se escondió debajo de la mesa y desde ahí observó los medios-cuerpos de los intrusos,  gritando, tirando y golpeándolo todo. En el sueño todo es igual a la realidad. Escucha el llanto de su hermana y el ruido de un helicóptero. Ve en el suelo los anteojos de su papá y fracasa repetidamente en el intento de alcanzarlos para dárselos. Lo angustia que no tenga sus anteojos, porque no va a poder ver. Finalmente un milico-poli lo atrapa del brazo y lo tironea para sacarlo de abajo de la mesa. El viejo está luchando para que no lo tabiquen y por un segundo llegan a verse. Escucha su voz por última vez: -“cuidá de tus hermanas”. Luego los encierran a los tres en una habitación. Se cierra la caja de Pandora.

No hay comentarios:

Publicar un comentario